viernes, 28 de septiembre de 2007

EL MIRÓN




En una pausa en el viaje

aparque el coche en la orilla de una playa,

me quedaba asentado en la sombra para descansar,

quería echar una siesta,

pero lo que tenia delante de mi me despertaba,

tenia el sol detrás de mi, un esplendido foco de luz,

todo quedaba perfectamente iluminado,

al fondo, en la orilla del mar, una mujer topless hacia ejercicios,

corría de un lado a otro, movía sus brazos arriba y abajo,

sus pechos saltaban de alegría y su dueña no se cansaba moviendo los,

parecía que los ejercicios eran para los senos,

no eran grandes ni pequeños, pero formas firmes,

la guapa daba placer a toda la playa.

***

El sol calentaba, ya con la inclinación de la tarde,

para aprovechar la bien,

la mejor posición acostado en la toalla era,

poner las piernas dirección sol y calentarte por abajo,

abrirlos un poco era todavía mas agradable,

el sol es un buen migo,

hasta que te acaricia y te "calienta" mucho,

te puede incluido excitar y

las piernas se abren y cierran rítmicamente,

ya no puedes seguir mas, estás en una playa pública,

desde lejos ya se adivina la excitación,

enfría te un poco chica, el mar esta cerca.

***

Ahora se acerca una mujer con formas exuberantes,

pone la tumbona con la toalla encima,

y... que sorpresa... también se quita el sostén,

sus formas se mueven como olas,

son como dos bebes que tiene que cuidar,

coje la crema solar en una mano y empieza repartirla cuidadosamente,

levanta con la otra mano un pecho y

reparte por abajo, por arriba, alrededor,

lo acaricia con amor, el pezón lo agradece,

luego repite la misma operación con el otro niño (pecho),

se acuesta de espaldas,

casi se ahoga con sus propios senos,

abre las piernas feliz,

pierde casi el sentido y practica el descanso total.

***

Yo, el mirón, me lo pasó muy bien con mis observaciones, no dormí, al contrario, me animaba, pero tenía que seguir mi viaje y ya veré lo que haré con el resto del día.

miércoles, 12 de septiembre de 2007

AHORA UNOS DÏAS DE PLAYA

Playa larga en Taragona

domingo, 9 de septiembre de 2007

¿ TE LO ENSEÑO ?

NO POSEEMOS LA TIERRA:
*
ES ELLA QUE NOS POSEE


Hoy hemos vuelto de un viaje al centro de los Pirineos,


del valle de "la Pineta" en Bielsa, Huesca, España.


Al fondo vemos las montañas que hacen la frontera con Francia.


Un montañero puede llegar en 4 ó 5 hrs a la frontera a 2800 m de altitud,


con un lago helado y un refugio, si hace falta.


¡Tres días con estos increíbles colores de las montañas!